Siempre he pensado que recorrer ese camino solo, sin la ayuda de una profesional como María José habría sido muchísimo más dificultoso y mucho menos efectivo.

Destacar también que es cierto que nunca se abandona al paciente, esto es rigurosamente cierto en el caso de María José. Me dedicó su tiempo incluso una vez que había acabado el programa para dudas y consejos. Su opinión fue muy importante por su experiencia y por tener una opinión externa a la hora de tomar decisiones importantes.

Su Valor Añadido como persona es que te proporciona calidad, además de cantidad de información con su experiencia.

Te “obliga” a ser flexible y generar un alto grado de adaptabilidad, proporcionando mecanismos para que tu actitud cambiara a positiva, lo que añade fortaleza mental suficiente para afrontar periodos de cambio, generando así un círculo virtuoso, potente.

Gracias al seguimiento de MJS, identifiqué mi problema: Falta de orientación clara y definición de objetivos.

He conocido muchas personas en el ámbito laboral, todas profesionales, porque se dedicaban a su profesión…obvio. PROFESIONALES así escrito, me sobran dedos de las manos para contarlos. MJS está entre ellos son personas que recordarás siempre porque supusieron un punto de inflexión en tu vida. Quiero agradecer a MJS, la transformación a la que me “invitó” y que me ha llevado a alcanzar lo que antes era un sueño en el ámbito laboral, PERFECTO¡¡.

Cuando en 2008 conocí a María José vivía la experiencia de un ERE en el trabajo y también pasaba por una época personal bastante complicada, así que imagino el papelón que se encontró de repente jajajaja. Supo entenderme desde el primer momento, y con su empatía me sentí siempre guiada y apoyada. Tanto en lo profesional como en lo personal.  Me dio las pautas y las herramientas necesarias para salir adelante y con su ayuda lo conseguí.

Tengo que decirte que recibí por parte tuya toda la ayuda del mundo para “parar máquinas” durante varias semanas y replantearme mi vida con tu ayuda y las herramientas necesarias que me enseñaste para reconducir mi futuro.

En la vida, hay momentos buenos y malos. He aprendido a disfrutar de los buenos en el presente; los malos, vienen solos y sin avisar. Me enseñaste a superar una mala etapa que por fortuna remonté con tu ayuda y mi actitud.

Ya ha pasado mucho tiempo pero recuerdo aquellos días de invierno donde en cada visita esperaba recibir una lección de cariño, humildad y fuerza  que me ayudo para seguir peleando, guerreando y batallando por estos mundos.